Cuando comenzó la guerra en Ucrania, las mujeres en particular huyeron con sus hijos y fueron llevadas a refugios de emergencia en toda Alemania. Estos alojamientos de emergencia se crearon en muy poco tiempo y a menudo eran rudimentarios en términos de equipamiento, especialmente en el ámbito del aprendizaje y las oportunidades de actividades adaptadas a los niños. Era importante que los niños en edad escolar crearan rápidamente un entorno de aprendizaje que les diera acceso a la educación y a una estructura diaria.
Se financiaron muebles adecuados y equipamiento necesario para el aprendizaje y salas de grupo para diez instituciones de Mecklemburgo-Pomerania Occidental con el fin de crear un entorno propicio para el aprendizaje, los deberes y las actividades educativas y de ocio.
Con la remodelación de las salas de aprendizaje y de grupo de estos diez alojamientos de Malteser se crearon mejores condiciones y se optimizaron significativamente las oportunidades de aprendizaje y la variedad de actividades de ocio para los niños. Al mismo tiempo, las salas proporcionan una sensación de estabilidad y estructura para que los niños puedan concentrarse en el contenido escolar.
